El triunfo futuro de la Iglesia Católica

"El autor del contenido de este sitio web es: José Andrés Cuadros Del Carpio".

(Apologética)
El demonio siempre quiere deformar la doctrina y sabiduría de la teología, pero no lo puede hacer jamás en la Iglesia Católica pues Jesucristo le dijo a Pedro que ni el infierno ni el demonio tendrán potestad sobre la única iglesia que fundó El, eso quiere decir que la teología católica es perfecta, y a su doctrina se le va sumando dogmas y conocimientos verdaderos con el tiempo, que son revelados por el Espíritu Santo a través de los hombres de Dios, de nuestra Iglesia fundada por Jesucristo.

Por ser la Iglesia Católica el cuerpo místico de Jesús es que hasta hace pocos siglos atrás tenía mucha autoridad y poder, porque es el único camino perfecto para llegar a Dios. Además nuestra Iglesia nunca dejará de existir pues seguirá en el Reino de Dios. Después de la segunda venida de Jesús y a partir de ese día todos los que quieran estar con Dios tendrán que aceptar que la Iglesia Católica es la única iglesia verdadera y universal de Dios donde está la gloria divina y ese tiempo será uno de los de mayores triunfos y gloria de nuestra iglesia.

Todos los que han ayudado a la propagación de una doctrina deformada y falsa en las miles de iglesuchas protestantes que existen tendrán el mismo destino de Satanás porque en el Libro de Apocalipsis dice que quienes deforman La Biblia caerán sobre ella todas las plagas que se narran en ese libro y esto se hará con estas iglesias que no se ponen de acuerdo entre ellas en su doctrina, y tratan de dividir a los cristianos en grupos pequeños, pues ello también está mal porque Jesús dijo que seamos uno sólo con El para ir donde Dios Padre

A la hora de la muerte nos será más útil haber aceptado la doctrina de la Iglesia Católica y haberla cumplido por muchas razones, entre ellas porque nadie puede decir que no se enteró de la existencia de templos católicos y sus enseñanzas que están en casi todos los países del mundo.

Finalmente la solución para eliminar esta división entre los cristianos es conocer la doctrina católica, tener un catecismo y Biblia católica y conocer el magisterio y tradición de nuestra iglesia para saber la verdad, y pedirle ayuda al Espíritu Santo cuando no entendamos algo, además debemos defender a nuestra iglesia, pues los que enseñan la verdad algún día brillarán con la luz de Dios.